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Conozcamos y conservemos la riqueza de la Reserva Natural de Usos Múltiples Monterrico

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La belleza paisajística de la Reserva Natural de Usos Múltiples Monterrico (RNUMM) es espectacular. Fotos: Lucy Calderón

Personal del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP) y del Centro de Estudios Conservacionistas (CECON) junto con colaboradores del Programa de Naciones Unidas Para el Desarollo (PNUD) actualizaron la propuesta del nuevo plan maestro de la RNUMM, así como la iniciativa de ley para ampliar esta área protegida y elaborar su ficha informativa RAMSAR.  

Para incentivar la restauración, reforestación y manejo sostenible del ecosistema manglar en la RNUMM, el PNUD, a través del Proyecto Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad en Áreas Protegidas Marino Costeras, apoyó la capacitación de personal técnico de instituciones socias e integrantes de las comunidades aledañas. 

 

Para que la belleza natural de la RNUMM se mantenga es importante cumplir con lo estipulado en su plan maestro. Este instrumento indica cómo está zonificado el lugar y las actividades que pueden y no efectuarse ahí, explica el biólogo Edson Flores, técnico del PNUD.

Durante la época de lluvia, además de los manglares, la zona reverdece con la presencia de ninfas, tulares y lirios.

Los tulares que crecen en el área protegida son hábitat de muchas especies de animales.  

El canal de Chiquimuilla tiene más de 150 kilómetros, abarca los departamentos de Santa Rosa, Escuintla y Jutiapa. Las zonas mejor conservadas son las que están dentro de la RNUMM, comenta el guardarrecursos Tito Flores.

Durante el recorrido del canal de Chiquimulilla se puede observar la majestuosidad de volcanes como el de Fuego, Pacaya, Tecuanburro, Agua y Acatenango.

La RNUMM también es hábitat y refugio temporal de muchas especies de aves.

En esta laguna conocida como Puente Grande, en el canal de Chiquimulilla, los habitantes de las comunidades aledañas se abastecen de camarones y los peces que entran a la zona para desarrollarse.

Muchos de los pescadores que llegan a la laguna Puente Grande ya han sido capacitados e informados sobre las técnicas de pesca permitidas para que esta sea sostenible y puedan seguir teniendo su sustento diario, comenta César Grijalva, guardarrecursos del CECON-USAC.  

Las raíces de los mangles que hay en la RNUMM sirven de defensa natural contra tormentas fuertes.

Osmundo Cuéllar es uno de los guardarrecursos del CONAP asignado a la RNUMM. Tiene 13 años de trabajar en la zona y también apoya a las personas de las comunidades para que mejoren su oferta de servicios turísticos. Por ejemplo, para evitar la contaminación, efectúan recorridos de dos horas por el canal, en botes de remo. Quienes deseen hacer la travesía pueden avocarse al CECON donde los guardarrecursos los orientarán y ayudarán a contactar a los lancheros comunitarios.

Estos son los tortugarios donde se "siembran" los huevos de tortugas parlamas (Lepidochelys olivacea). Los huevos provienen de las cuotas de conservación que deben entregar los parlameros o personas que se dedican a recoger los huevos de las tortugas marinas que llegan a anidar a playas del Pacífico guatemalteco.

En la región sur-oriente del país hay 12 tortugarios regidos por el CONAP. Cada año, entre julio y octubre, época de liberación de tortugas marinas bebés, liberan unas 250 mil. Los nenonatos son liberados en la playa a las 5 de la mañana o a las 5.30 de la tarde. Durante las liberaciones, los turistas deben permanecer detrás de las tortugas, ser solo observadores; si las tocan, las desorientan y esto puede provocar que años después no sepan cómo regresar a la playa donde nacieron.

Las tortugas marinas bebés tienen una pequeña reserva de energía que las ayuda a llegar al mar, en donde permanecerán varios años, hasta que según su especie, sea el momento de migrar hacia zonas de alimentación, reproducción o anidación.

Las tortugas marinas son especies en peligro de extinción por lo que debemos evitar la extracción ilegal y compra de sus huevos.

Las tortugas marinas son indicadoras de la salud de las costas y el mar; cuando su presencia en ambos sitios disminuye o es nula, es signo de que algo anda mal.

Por los múltiples beneficios que ofrecen los bosques de mangle que la integran, así como por sus incomparables playas de arena volcánica, a donde cada año llegan a anidar tortugas marinas, la Reserva Natural de Usos Múltiples Monterrico (RNUMM) es un importante sitio de riqueza natural y atractivo turístico de Guatemala.

Las 2,800 hectáreas de esta reserva de protección especial de fauna y flora abarcan los municipios de Taxisco y Guazacapán, en el departamento de Santa Rosa; y es un lugar del Pacífico guatemalteco bastante frecuentado por visitantes nacionales y extranjeros.  

La RNUMM forma parte del Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas (SIGAP) y es administrada por el Centro de Estudios Conservacionistas (CECON) de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC).

Su actual coordinadora es la bióloga Ana Silvia Morales, quien luego de haber sido investigadora asociada del CECON desde 2008, participó en un proceso de selección para optar al cargo que ahora ocupa. “Me siento contenta con este logro profesional; estoy familiriazada con la reserva y hasta puedo decir que le tengo aprecio”, comenta Morales, cuya experiencia en investigación se enfoca en la restauración de manglares, la caracterización de las plantas que hay en el área protegida y el conocimiento de la relación de las comunidades aledañas con los recursos naturales de los cuales dependen para vivir. 

Ana Silvia Morales, coordinadora de la RNUMM

Bióloga Ana Silvia Morales, coordinadora de la reserva. Foto:  Lucy Calderón/EcocienciaGT

De acuerdo con Morales, la RNUMM tiene muchos ecosistemas importantes que, en relación con los servicios que ofrecen a las poblaciones circundantes, no han sido valorados como se debería. “Hay mucho por hacer”, resalta.

Lo bueno es que al tener experiencia en investigación, Morales sabe que para orientar mejor los esfuerzos de la gestión de la biodiversidad, la toma de decisiones debe verse apoyada en el conocimiento científico y eso es lo que ella hará.

“Quiero atraer a más investigadores asociados y enfocar los estudios científicos a las prioridades del área, donde la restauración es un tema relevante. Si bien la RNUMM abarca 2,800 hectáreas de manglar, estas se han visto seriamente degradadas por diversas razones. Por eso, al igual que las áreas donde crece tul, es importante recuperarlas. La pesca es otro aspecto que hace falta evaluar –añade Morales-. La pesca tiene que ser sostenible para no afectar a las mismas poblaciones de peces y a las personas que dependen de ella para subsistir”.

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