Chiquitos pero peligrosos: insectos que transmiten enfermedades

Esta chinche transporta al protozoario Trypanosoma cruzi que produce la Enfermedad de Chagas, una afección parasitaria, sistémica y crónica. Foto: Lucy Calderón
Facilitar a todas las personas el acceso a agua potable y saneamiento es de vital importancia para prevenir las enfermedades infecciosas propagadas por algunos organismos, como insectos y caracoles, los cuales transportan virus, parásitos y bacterias a los humanos y otros animales.
Estas afecciones denominadas vectoriales son más frecuentes en zonas tropicales como Guatemala y representan un gran riesgo de enfermedad y mortalidad para las comunidades, a la vez que ocasionan ausentismo escolar, incrementan la pobreza y generan costos a los sistemas de salud.
La globalización del comercio y los viajes, la urbanización, la depredación ambiental, el calentamiento global y el cambio climático están produciendo gran impacto en la transmisión de estas enfermedades e incluso aparecen en países donde antes no existían, señalan las Organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud (OPS y OMS, respectivamente).
De acuerdo con los líderes del proyecto: “Intervenciones de Ecosalud para la Prevención de la Enfermedad de Chagas en América Central”, debido a la destrucción de los ecosistemas, se han producido cambios en el número de sitios de cría del vector o en la distribución del hospedero; invasiones del nicho o transferencias entre especies del huésped; cambios genéticos en los vectores o patógenos y la contaminación del ambiente, lo cual ha repercutido en que los insectos se muden a las viviendas y causen enfermedades que nos debilitan, no nos permiten trabajar y cuyo tratamiento es caro.
La OPS/OMS añaden que en la región de Las Américas, las enfermedades vectoriales que causan mayor impacto son la malaria, el dengue, el Mal de Chagas, la Leishmaniasis, la filariasis linfática, la esquistosomiasis, la oncocercosis y el paludismo.
¿Cómo protegernos?
En primer lugar, podemos apoyar y promover el combate de estas enfermedades con un enfoque de Ecosalud, es decir, el mejoramiento sostenible de la calidad de vida de las personas, a través del estudio de las relaciones de los ecosistemas, los sistemas sociales y la salud humana, con la pertinente participación comunitaria.
La OPS, que apoya el enfoque de Ecosalud, también recomienda:
- Reducir el número de criaderos de animales domésticos cerca de las casas o de las comunidades
- Tapar los recipientes donde se almacena agua
- Eliminar la proliferación de charcos y drenajes a flor de tierra
- Limpiar los jardines y evitar que haya recipientes que acumulen agua sucia
Para conocer el proyecto “Intervenciones de Ecosalud para la Prevención de la Enfermedad de Chagas en América Central”, visitar: chagasecosalud.censalud.ues.edu.sv
Add new comment